Hoy he conocido el otro lado de los Juegos. El que sucede detrás de las pantallas, los cables y las emisoras. El que gestiona millones de datos, imágenes y declaraciones. Es el trabajo en el que nadie repara, pero que todo el mundo disfruta una vez cada cuatro años. Se desarrolla en el Centro Internacional de Transmisión, una espécie de Mordor que agrupa periodistas y medios de comunicación de todo el mundo.
Cuando me han puesto la acreditación en el cuello he empezado a darme cuenta de la magnitud del asunto. No podía empezar mi primer trabajo redactando en la revista de mi pueblo, tenía que ser retransmitiendo unos Juegos Olímpicos.
Mañana empezamos con el dúo libre y si esto que veis a continuación no es el Lago Ness, (como nos ha advertido entre pasillos Dani Ballart), es porque todavía no han encontrado al monstruo.
Parque Acuático Maria Lenk |
El agua de la piscina de sincro, donde hasta hoy se jugaba a waterpolo, tiene muy buena pinta comparada con la de saltos, pero está tan turbia que impide a las nadadoras ver bién por debajo del agua. Esta tarde han suspendido los entrenamientos con música para repasar la competición, porque parece que se ha roto un filtro de la piscina. No es muy normal nadar en unas Olimpiadas sin poder ver nítidamente a tu/s compañera/s, así que la organización se ha puesto manos a la obra para solucionarlo.
La buena notícia es que con la de peripecias que hemos pasado a lo largo de nuestra carrera deportiva, Ona y Gemma están preparadísimas para cualquier imprevisto, y mañana nos van a dejar con la boca abierta al compás del Concierto de Aranjuéz.
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