martes, 30 de diciembre de 2014

Como peces fuera del agua

"Sea entre sal o entre cloro, que el agua siempre nos conduzca al éxito"

Con ésta frase dejamos nuestra huella en el interior del barco de la Fundación We Are Water con el que hoy los hermanos Bruno y Willy Garcia se adentraran al mar mediterráneo para dar la vuelta al mundo. Participan juntos en la Barcelona World Race, la única regata oceánica a vela sin escalas y con solamente dos tripulantes por barco a quienes, si todo va bien, les esperan tres meses trepidantes de viaje en alta mar.



Nosotras, como compañeras de medio acuático, aunque sea en condiciones muy diferentes, tuvimos la oportunidad de apadrinar su barco hace unos días para dar soporte a ésta iniciativa solidaria del grupo Roca. La embarcación cruzará tres océanos y un total de 23.000 millas náuticas difundiendo su mensaje por todo el planeta: sensibilizar a la gente de la importancia de un desarrollo justo y sostenible de los recursos hídricos. A través de diferentes proyectos, la asociación trabaja tanto desde la adecuación de infraestructuras (pozos, sistemas de saneamiento etc.) como en la intervención desde los ámbitos de educación, salud e investigación.

Y como no podía ser de otra manera, nuestra curiosidad insaciable nos llevó a cotillear cada uno de los rincones del barco, al que pudimos entrar e incluso navegar, donde cada vela, cuerda e instrumento está estratégica y milimétricamente colocado, en su justa posición y peso para que nada se pueda desestabilizar durante la expedición.

Tanto los skipers (los que llevan el barco) como los técnicos (los que lo habilitan para que todo salga sobre ruedas, o mejor dicho sobre orzas) nos hicieron una ruta por su interior. "Como Pedro por su barco" nos estiramos en la “cama” de los tripulantes, donde uno duerme mientras el otro trabaja durante tres horas, luego al revés, y así durante todo el día; vimos el sistema de radar con una webcam desde el cual deben hacer mini conferencias diarias, explicando sus aventuras; y nos imaginamos cómo debe ser tener que aclimatarse a la temperatura de los trópicos para luego adentrarse en el frío extremo de la Antártida.

¡Y todo esto al lado de tu hermano! La verdad es que nosotras también acabamos formando una espécie de família. Después de tantas horas no hay nada que no sepas de tu compañera, incluso es prácticamente imposible tratar de ocultarle algo porque con una mirada lo lee todo. Ésta situación puede ser tan positiva como peligrosa, ya que por un lado como más afinidad y compenetración exista más fluirá la dinámica del grupo y más facil será sincronizar, pero por el otro, cuando sobrepasas ciertos límites insospechables de confianza, la línea que separa tu espacio vital con el de la otra se vuelve cada vez más fina y hay que ir con mucho cuidado de no hacerle pagar a la vecina tu nerviosismo, inseguridad o preocupaciones en los momentos complicados.

Pero volviendo a nuestro tour por el barco... La concepción que tenemos del agua: un medio inestable pero tranquilo y "domesticado" dentro de una piscina, dio un giro de 360º cuando nos empezamos a hacer a la idea de lo salvaje que puede llegar a ser el mar (tampoco hemos nacido ayer, y la verdad es que habíamos visto muchas pelis, pero cuando lo ves de cerca la cosa cambia).

Por supuesto todos se recrearon en contarnos las anécdotas más catastróficas, que si una vez uno cayó des del palo mayor, que si otro se quedó inconsciente en proa durante tres días porque se golpeó con nosequé, que si el de más allá acabó en una isla desierta comiendo raíces y reparando el barco con madera de árboles... Tenemos un debate pendiente sobre qué es más nocivo para la salud mental si el exceso de sal o de cloro.

Pienso que fue una gran experiencia poder cambiar de perspectiva durante unas horas. A menudo pensamos que lo que hacemos nosotros es lo más laborioso, difícil y estresante. Nos pasamos el dia centrados en unos objetivos y soportando cada tarea que nos permita conseguirlos y reconozco que nosotras desde dentro de esa burbuja muchas veces perdemos de vista que existe un mundo fuera de la piscina.


Nos reímos un montón comparando tonterias de la sincro con la navegación, incluso cuando hicimos la vuelta de rigor por el puerto parecíamos las grumetes Pescanova moviendo cuerdas, girando palancas y haciendo la croqueta por proa como si lo hubiéramos hecho toda la vida. Al final como no aguantabamos más fuera del agua nos queríamos tirar a probar alguna figura, pero luego nos dijeron que la temperatura rondaba los 15 grados (nosotras tenemos frío a 27º), y pensamos que igual era un poco precipitado, por lo que nos pusimos a practicar un poco de piernas de ballet...


Gracias a Xavi Torras por permitirnos "participar" en esta aventura marina, y sobretodo a Bruno, Willy, Puro, Ruben, Oscar, Víctor, Martí... Todos los que formais parte de este proyecto, porque nos habéis hecho sentir como en casa. No sé qué pasará durante estos tres meses pero como grupo humano ya lo tenéis todo ganado.

jueves, 25 de diciembre de 2014

La cara más artística

Y cuando casi parecía que iban a salirle telarañas a este blog…

Interrumpo la locura estudiantil que impera en este período pre, durante y post Navidad, en el que la UAB nos obsequia con el divertidísimo festival “Apuntes everywhere presents: te creías que ibas a tener vacaciones… ¡pero no!”. El otro día me di cuenta de que ésta situación me estaba sobrepasando cuando casi me como el boli y subrayo los apuntes con un turrón.

Tengo pendiente explicar la última aventura sincronil de nuestras jóvenes promesas de la selección que hace dos semanas participaron en el campeonato World Trophy de Pekín. Este trofeo es un Open mundial organizado por la FINA que se celebra una vez al año. Es el único evento oficial de sincronizada donde se permite que las nadadoras lleven accesorios durante su actuación.

(2010) Puesta en escena World Trophy vs. Juegos Olímpicos (2012)

La iniciativa surgió el 2006 como una oportunidad para explotar la cara más creativa y expresiva de la sincro, ya que en las competiciones convencionales está realmente limitada por el reglamento. Por ejemplo, en un europeo, mundial u olimpiada está prohibido que el bañador tenga transparencias en según qué partes del cuerpo, o que la tela cubra una parte del brazo o pierna como hacen en otros deportes artísticos (patinaje, gimnasia). Las pinturas de la cara también deben ceñirse al contorno de los ojos y labios, y el pelo debe ir recogido en un casquete ajustado.


(2013) Maquillaje World Trophy vs. Campeonato del mundo (2011)

Reconozco que es complicado establecer límites en un deporte artístico, precisamente porque estás restringiendo una forma de arte. Si nos remontamos al origen de la palabra arte, de nuestros antepasados griegos y romanos, encontramos que es la forma de expresar una visión personal basada en la propia inspiración, sin ninguna pauta o patrón establecido. Así pues, en el momento en que la sincronizada pasa de ser un baile acuático a un deporte pasa también de la libertad total de creación a ceñirse a unos parámetros, con el objetivo de que los jueces puedan valorar a las nadadoras de la forma más justa posible.

(2010) Accesorios World Trophy vs. Campeonato del mundo (2013)

Así pues el World Trophy es una especie de reivindicación de la sincronizada como espectáculo acuático, donde hay menos límites escénicos y coreográficos. Solo se valora la impresión artística y las puntuaciones son dadas por 10 jueces, la mitad miembros de la FINA y la otra mitad formada por “celebrities” del lugar donde se compite, que suelen ser actores, ex-deportistas o cantantes populares. Cada país debe presentar 5 coreografías: equipo libre (8 personas), combo (10 personas), equipo y dúo temático que tienen que enmarcarse en un tema elegido por la organización, y la rutina highlight (de 8 a 12 personas) donde la base de la coreografía son las acrobacias y los elementos de superficie.

Para que os hagáis una idea…


Equipo temático

Montreal 2009. La coreografía debía representar algo relacionado con tu país, por lo que representamos el estilo flamenco con abanicos. Artistas invitadas: Andrea Fuentes, Ona Carbonell, Thaïs Henriquez, Alba Cabello, Paula Klamburg, Marga Crespí, Cristina Salvador y la aquí presente.




Atención a las medias asesinas.
Volviendo a mirar éste vídeo me han venido recuerdos muy divertidos... Nos volvimos locas coreografiando con los abanicos, era un estrés superlativo: ahora guárdalo por aquí, sácalo por allá, rema con una mano mientras lo cierras con la otra... De repente en medio de una rutina te encontrabas uno flotando delante tuyo y se lo tenías que pasar a la de detrás en plan misil a la velocidad de un colibrí psicópata para que desde fuera no se notara.

También Intentamos decorar nuestros brazos y piernas con unas medias de rejilla que al final resultaron ser la peor idea de la historia. Nos las pusimos directamente en la exhibición antes de irnos a Montreal, sin probarlo previamente ni nada. Recuerdo que tal y como empieza a sonar la música noto una especie de extensiones saliendo de mis pies... Miro a mi alrededor y veo a siete personas digievolucionando en pulpos, todas las medias saliendo disparadas por el aire. Hubo un momento en el que a mi se me enganchó el pie con el bañador de la compañera y alguien casi pierde un ojo por un ataque de medias voladoras... Finalmente, como veis, decidimos prescindir de esa terrible decoración.

Duo temático

Pekín 2014. La coreografía debía girar alrededor del género Rock and Roll, ellas escogieron “Great balls of fire” de Jerry Lee Lewis. Artistas invitadas: Cecil Jimenez y Paula Ramirez.




Equipo highlight

Pekín 2011. La coreografía requería agrupar una figura en cadencia y diferentes tipos de acrobacias. Artistas invitadas: Gemma Mengual, Andrea Fuentes, Ona Carbonell, Thaïs Henriquez, Alba Cabello, Marga Crespí, Laia Pons, Sara Levy, Txell Mas y la aquí presente.




En general, cada vez hay más tendencia a participar con equipos junior ya que es un campeonato que requiere bastante preparación y puede retrasar la preparación de los objetivos importantes de la temporada. Desde sus inicios, éste ha sido el primer año en el que las absolutas no hemos participado en el World Trophy, pero por suerte las corresponsales Cecil Jiménez y Paula Ramirez (recientemente absolutas que se infiltraron en el grupo de juniors) nos han hecho partícipes de todas sus aventuras chinas.